Estudio advierte que tener hijos aumenta el riesgo de obesidad
Investigadores advierten que las estrategias para reducir la obesidad debieran enfocarse en quienes ya han dado a luz.
Las mujeres que tuvieron hijos corren más riesgo de engordar que las que no son madres, lo que para los investigadores sugiere que habría que orientar las estrategias para reducir la obesidad hacia quienes dieron a luz.
Los autores indicaron que había que prestar especial atención a las mujeres de las minorías sociales, que están especialmente en riesgo de engordar después del parto.
Un estudio sobre 2.923 mujeres reveló que el riesgo relativo de engordar, durante cinco años, fue 3,5 veces mayor entre aquellas que habían tenido un hijo que entre las que aún no eran madres.
Ninguna de las participantes era obesa al inicio del estudio y todas eran jóvenes -entre 14 y 22 años-. La mayoría -el 80%- tenía peso normal y el 65 % no había finalizado el colegio secundario.
Al final de los cinco años de estudio, el 52 % de las participantes no había tenido hijos y el 48 % había dado a luz por lo menos a un bebé. El 37 % de ese segundo grupo tenía más de un hijo.
La incidencia de obesidad a cinco años fue de 11,3 por cada 100 mujeres que habían tenido hijos, a diferencia de 4,5 por cada 100 mujeres que no eran madres.
Asimismo, las participantes que por lo menos habían tenido un hijo y las que habían tenido dos o más niños, tenían entre tres y cuatro veces más riesgo de ser obesas hacia el final del estudio, a diferencia de las mujeres que no habían tenido bebés.
La incidencia de la obesidad a cinco años fue de 8,6 por cada 100 mujeres con por lo menos un niño y de 12,2 cada 100 mujeres con dos o más hijos.
La incidencia de obesidad asociada con el embarazo fue también mayor entre las mujeres afroamericanas e hispanas que en las blancas.
El equipo dirigido por la doctora Esa M. Davis, de la Case Western Reserve University, en Cleveland, Ohio, halló que entre las madres que engordaron en los dos años posteriores al parto, apenas el 11 % recuperó su peso normal en los siguientes tres años hasta completar el estudio.
En el artículo publicado en la edición en internet de American Journal of Public Health, los autores señalaron que tener un hijo elevó el riesgo de obesidad en las mujeres inmediatamente después del parto.
“Esto es preocupante porque la mayoría de las mujeres que engordan después del parto siguen teniendo sobrepeso o siendo obesas” durante los siguientes cinco años, sostuvieron los autores.
“Nuestro estudio demostró también que tener un hijo aumentaba las diferencias étnicas observadas a través de los niveles de obesidad”, señaló el equipo.
Fuente: Diario La Tercera
11 de diciembre de 2008