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Una dieta mediterránea de calidad saludable modifica parcialmente la asociación entre la obesidad y la mortalidad cardiovascular, según un nuevo estudio publicado esta semana en PLOS Medicine por Karl Michaëlsson de la Universidad de Uppsala, Suecia, y sus colegas.

La masa corporal (IMC) más alta representó 4.0 millones de muertes a nivel mundial en 2015 y más de dos tercios de esas muertes se debieron a enfermedades cardiovasculares (ECV). Los estudios han sugerido que otros factores, incluidos los patrones dietéticos saludables, podrían modificar el mayor riesgo de ECV asociado con un IMC más alto. En el nuevo estudio, los investigadores estudiaron el IMC, la dieta y la mortalidad entre 79.003 adultos suecos inscritos en la cohorte sueca de mamografías y la cohorte de hombres suecos. 

La adherencia a una dieta de tipo mediterráneo (mMED) se evaluó en una escala de 0 a 8, integrando información sobre la ingesta de frutas y verduras, legumbres, frutos secos, cereales sin refinar o ricos en fibra, pescado, carnes rojas y procesadas y aceite de oliva. También se dispuso de información sobre la edad, la actividad física, el tabaquismo y la situación socioeconómica de los participantes de la cohorte.

Durante 21 años de seguimiento, murieron 30.389 (38% de los participantes). Entre las personas con sobrepeso, el grupo con el cociente de riesgos (HR) más bajo de mortalidad por todas las causas fue el que presentaba un mMED alto (HR 0,94; IC del 95%: 0,90-0,98 en comparación con aquellos con peso normal y alto mMED). Los individuos obesos que también tenían un mMED alto no tuvieron una mortalidad significativamente mayor en comparación con aquellos con un peso normal y un mMED alto (HR 1,03; IC del 95%: 0,96-1,11). Por el contrario, los individuos con un IMC normal pero un mMED bajo tuvieron una mortalidad más alta (HR 1,60; IC del 95%: 1,48-1,74) que aquellos con peso normal y mMED alto. Para la mortalidad por ECV, que representó 12.064 de las muertes, los hallazgos fueron muy similares. Sin embargo, aunque la mortalidad de las enfermedades cardiovasculares asociada con un IMC alto se redujo mediante la adherencia a una dieta mediterránea, no se contrarrestó por completo. Además, un IMC más bajo no contrarrestó la elevada mortalidad por ECV asociada con un mMED bajo.

«Estos resultados indican que la adherencia a dietas saludables como una dieta mediterránea puede ser un enfoque más apropiado que evitar la obesidad para la prevención de la mortalidad general», dicen los autores. «No obstante, una dieta saludable puede no contrarrestar por completo la mayor mortalidad por ECV relacionada con la obesidad».

Fuente: https://medicalxpress.com

Referencia: Michaëlsson K, Baron JA, Byberg L, et al. Combined associations of body mass index and adherence to a Mediterranean-like diet with all-cause and cardiovascular mortality: A cohort study. PLoS Med. 2020 Sep;17(9):e100333.