LA INFAME “HORMONA DEL HAMBRE” VINCULADA A LOS DÉFICITS DE MEMORIA EN LA ENFERMEDAD DE ALZHEIMER

La ghrelina es conocida como la “hormona del hambre” por el papel que desempeña en la promoción del apetito. La hormona es secretada por el tracto gastrointestinal y tiene la capacidad de cruzar la barrera hematoencefálica para en última instancia, estimular las células cerebrales en el hipotálamo indicando que estamos listos para comer. Sin embargo, investigaciones recientes han comenzado a descubrir otros roles que la ghrelina puede desempeñar, fuera del hipotálamo.

Se ha descubierto que la ghrelina es activa en el hipocampo, lo que lleva a algunos científicos a plantear la hipótesis de que juega un papel importante en el aprendizaje y la memoria. Investigaciones previas que exploraron si la activación de los receptores de ghrelina en el hipocampo podría retrasar la progresión del Alzheimer no ha sido concluyente, tanto en humanos como en animales. Esta nueva investigación sugiere que la actividad cognitiva en un hipocampo sano requiere actividad tanto de los receptores de ghrelina como de los receptores de dopamina.

“Nuestra hipótesis es que esta disociación entre los receptores de ghrelina y dopamina puede ser lo que está afectando la cognición en pacientes con Alzheimer”, dice el autor correspondiente de la nueva investigación, Heng Du. “A medida que el cerebro pierde la función de los receptores de ghrelina debido a la beta amiloide, el cuerpo trata de compensarlo aumentando la producción de ghrelina y la cantidad de receptores de ghrelina. Pero el amiloide impide que los receptores funcionen”.

Du sugiere que este proceso es similar al mal funcionamiento de los receptores de insulina en pacientes con diabetes tipo 2. Independientemente de la cantidad de insulina presente en el cuerpo, el mecanismo fundamental es disfuncional. Entonces, en el caso de los déficits del hipocampo observados en la enfermedad de Alzheimer, mientras que la deficiencia de ghrelina podría estar jugando un papel, simplemente administrar ghrelina adicional o tratar de activar los receptores de ghrelina puede no ser un enfoque efectivo.

La nueva estrategia descrita en un artículo publicado en la revista Science Translational Medicine sugiere que la activación simultánea de los receptores de ghrelina y dopamina en el hipocampo podría ser la solución. Al probar la estrategia, los investigadores administraron ratones modelados con Alzheimer con dos compuestos diseñados para desencadenar ambos tipos de receptores.

“Cuando dimos estos compuestos simultáneamente, vimos cognición y memoria mejoradas en los ratones [con enfermedad de Alzheimer], y las lesiones en el hipocampo se redujeron”, dice Du. “La activación de ambos receptores al mismo tiempo fue clave; restauró la capacidad de los receptores para formar complejos. Cuando esto sucede, sospechamos que el receptor de ghrelina se protege y ya no puede unirse a la beta amiloide”.

Todavía es muy temprano para la investigación, y este estudio es esencialmente solo una prueba de concepto que afirma que este mecanismo neuronal particular puede ser alterado y mejorado de manera efectiva. Sin embargo, si el trabajo futuro lo valida, este mecanismo podría estar dirigido efectivamente a frenar, o incluso detener, algún deterioro cognitivo asociado no solo con la enfermedad de Alzheimer, sino con el envejecimiento en general.

“Sabemos que incluso en ausencia de demencia, muchas personas mayores tienen problemas de memoria, y esto podría estar relacionado con la disociación entre los receptores en el cerebro, incluso sin la presencia de amiloide”, dice Du.

Otra implicación intrigante del estudio es la sugerencia de que el Alzheimer puede ser un trastorno sistémico más amplio. Si estos síntomas cognitivos pueden asociarse con vías metabólicas u hormonales más generales, entonces hipotéticamente podría haber varias formas de inhibir su aparición, sin tratar específicamente de atacar partes del cerebro donde se identifica la degeneración.

Fuente: Universidad de Texas en Dallas

Referencia: Tian J, Guo L, Sui S, et al. Disrupted hippocampal growth hormone secretagogue receptor 1α interaction with dopamine receptor D1 plays a role in Alzheimer′s disease. Sci Transl Med. 2019 Aug 14;11(505).