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Un equipo de investigadores ha identificado una variedad de genes que están relacionados con niveles elevados de grasa corporal y que ofrecen protección contra algunos de los impactos negativos de la obesidad en la salud.

Un equipo de investigadores, dirigido por científicos de la Universidad de Copenhague y la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai, Nueva York, ha identificado una variedad de genes que están relacionados con niveles elevados de grasa corporal, además de ofrecer protección contra algunos de los impactos negativos de la obesidad en la salud. Los resultados se publicaron en la revista Nature Metabolism.

Las personas que viven con obesidad tienden a tener niveles de glucosa y lípidos en sangre no saludables, así como presión arterial alta. Como resultado, tienen más riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas. Pero los científicos han observado que hasta el 45% de las personas que viven con obesidad tienen una presión arterial y niveles de glucosa y lípidos saludables y, por lo tanto, pueden no tener un alto riesgo de enfermedad. La razón por la que este grupo de personas con obesidad se mantiene saludable no se ha entendido bien.

El profesor asociado Tuomas Kilpelainen del Centro de Investigación Metabólica Básica (CBMR) de la Fundación Novo Nordisk de la Universidad de Copenhague dice que los hallazgos arrojan nueva luz sobre la biología que puede desconectar un mayor nivel de grasa corporal de un mayor riesgo de diabetes y enfermedades cardíacas. “Los genes identificados parecen beneficiar nuestra salud al ayudar a mantener un tejido graso saludable. Algunos de los genes pueden ofrecer objetivos para el desarrollo de nuevas terapias que reduzcan el riesgo de diabetes y enfermedades cardíacas al mejorar la salud de nuestro tejido graso”, dice Tuomas Kilpelainen.

Los científicos hicieron el descubrimiento analizando datos de cientos de miles de personas que habían sido evaluadas por su grasa corporal y marcadores de riesgo de enfermedad. Identificaron 62 secciones del genoma que se asociaron significativamente con altos niveles de grasa corporal y menor riesgo de enfermedades cardiometabólicas. Otros análisis mostraron que los genes tenían una variedad de funciones en el cuerpo, incluida la regulación y el desarrollo de las células grasas, la distribución de la grasa corporal, así como la regulación de la energía y la inflamación. El científico Lam Opal Huang de CBMR llevó a cabo los análisis computacionales que identificaron los genes.

“Utilizamos un enfoque basado en datos en este estudio, que nos llevó a encontrar nuevos genes asociados con la salud del tejido graso, en lugar de los genes de obesidad conocidos asociados con el sistema nervioso central, que controlan la saciedad y suelen estar vinculados a la obesidad no saludable”, dice. Lam Opal Huang. Según la profesora Ruth Loos de la Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai, este nuevo conocimiento es un paso hacia un enfoque más matizado para tratar la obesidad. “Claramente, la obesidad es una enfermedad compleja y no todas las personas con exceso de peso corporal tienen el mismo riesgo de desarrollar enfermedades cardiometabólicas. Saber qué genes protegen a las personas de desarrollar diabetes y enfermedades cardiovasculares eventualmente nos ayudará a diagnosticar y tratar mejor a las personas con obesidad”.

Fuente: https://www.hindustantimes.com

Referencia: Huang LO, Rauch A, Mazzaferro E, et al. Genome-wide discovery of genetic loci that uncouple excess adiposity from its comorbidities. Nat Metab 2021;3:228-243.