LA DIABETES TIPO 2 SE PUEDE PREVENIR CON DIETA Y EJERCICIO INCLUSO EN PERSONAS CON ALTO RIESGO GENÉTICO

Un nuevo estudio demuestra que una dieta saludable y el ejercicio regular reducen el riesgo de diabetes tipo 2 incluso en personas con un alto riesgo genético. En otras palabras, todos se benefician de los cambios en el estilo de vida, independientemente del riesgo genético.

Un nuevo estudio de la Universidad del Este de Finlandia es el primero del mundo en demostrar que una dieta saludable y el ejercicio regular reducen el riesgo de diabetes tipo 2 incluso en personas con un alto riesgo genético. En otras palabras, todos se benefician de los cambios en el estilo de vida, independientemente del riesgo genético. La diabetes tipo 2 es un problema mundial. Según la Federación Internacional de Diabetes (FID), uno de cada once adultos en todo el mundo padece diabetes, y la diabetes tipo 2 representa el 90% de los casos. Hasta la fecha, los investigadores han identificado más de 500 variantes genéticas que predisponen a las personas a la diabetes tipo 2, pero los factores de estilo de vida también afectan el riesgo de desarrollar la enfermedad.

Los factores de riesgo importantes relacionados con el estilo de vida incluyen el sobrepeso, la baja ingesta de fibra dietética, la alta ingesta de grasas saturadas y la falta de ejercicio. Estudios anteriores han demostrado que la diabetes tipo 2 se puede prevenir eficazmente con cambios en el estilo de vida, pero no se ha explorado si la enfermedad se puede prevenir incluso en individuos portadores de numerosas variantes genéticas que los predisponen a la diabetes tipo 2. El ensayo T2D-GENE fue una intervención de estilo de vida de tres años en la que participaron casi 1.000 hombres de entre 50 y 75 años del este de Finlandia. Todos los invitados al estudio tenían niveles elevados de glucosa en ayunas al inicio del estudio. El grupo de intervención en el estilo de vida incluyó más de 600 hombres y el resto sirvió como grupo de control. Los hombres del grupo de intervención recibieron orientación sobre estilos de vida que promueven la salud en reuniones grupales y recibieron el apoyo de un portal web diseñado para el estudio. Los invitados al estudio pertenecían al tercil más bajo o más alto en términos de riesgo genético, es decir, tenían un riesgo alto o bajo de desarrollar diabetes tipo 2.

El riesgo genético se determinó basándose en 76 variantes genéticas que se sabe que predisponen a la diabetes tipo 2. Durante la intervención, ni los participantes del estudio ni los investigadores sabían a qué grupo de riesgo genético pertenecían los participantes. Todos los que participaron en la intervención recibieron la misma orientación sobre estilo de vida. Los hombres que participaron en la intervención de estilo de vida pudieron mejorar significativamente la calidad de su dieta. Aumentaron su ingesta de fibra dietética, mejoraron la calidad de las grasas en su dieta y aumentaron su consumo de verduras, frutas y bayas. También se observó pérdida de peso, aunque éste no fue un estudio real de pérdida de peso.

Los participantes ya eran físicamente muy activos al inicio del estudio y lograron mantener sus buenos hábitos de ejercicio durante todo el estudio. Con estos cambios se logró reducir el deterioro del metabolismo de la glucosa. La prevalencia de diabetes tipo 2 fue significativamente menor en el grupo de intervención en el estilo de vida que en el grupo de control. Los efectos de los cambios en el estilo de vida fueron igualmente significativos para los individuos, independientemente de si tenían un riesgo genético bajo o alto. «Estos resultados animan a todo el mundo a realizar cambios en el estilo de vida que favorezcan la salud. Además, demuestran la eficacia de la orientación sobre el estilo de vida en grupo y a través de Internet, que permite ahorrar recursos sanitarios», afirma la profesora universitaria y docente Maria Lankinen de la Universidad de Finlandia Oriental, primera autora del estudio.

Fuente: https://www.sciencedaily.com

Referencia: Lankinen MA, Nuotio P, Kauppinen S, et al. Effects of genetic risk on incident type 2 diabetes and glycemia: the T2D-GENE lifestyle intervention trial. J Clin Endocrinol Metab. 2024 Jun 18:dgae422.