METABOLISMO SALUDABLE A PESAR DE LA OBESIDAD: LA GRASA PARDA PODRÍA SER LA CLAVE

No todas las formas de obesidad son iguales y la grasa parda podría marcar la diferencia. Un estudio dirigido por el grupo de investigación de Florian Kiefer de la División de Endocrinología y Metabolismo del Departamento de Medicina III en MedUni Vienna y el Hospital General de Viena muestra que las personas que tienen un sobrepeso grave (obesidad) que también tienen grasa parda activa tienen un metabolismo mas saludable y usa más energía que las personas obesas sin grasa parda. Los nuevos hallazgos sugieren que la presencia de grasa parda puede proteger contra enfermedades secundarias relacionadas con la obesidad. El estudio se acaba de publicar en la revista internacional Diabetes.

Durante años, los investigadores médicos han estado tratando de comprender por qué algunas personas obesas tienen menos probabilidades de desarrollar afecciones de salud como diabetes o presión arterial alta que otras de peso similar. Ahora parece que se ha identificado un factor importante en lo que se conoce como “obesidad metabólicamente saludable” en forma de grasa parda.

“Durante mucho tiempo se pensó que la grasa parda beneficiaba el metabolismo porque, a diferencia de la grasa blanca de almacenamiento, que es mucho más común, puede quemar energía en forma de calor. Los bebés y los niños pequeños, en particular, utilizan tejido adiposo pardo para mantener la temperatura corporal, pero la proporción de grasa parda corporal disminuye con la edad y con el exceso de peso”, explica Florian Kiefer.

Sin embargo, en el estudio publicado recientemente, el grupo de investigación vienés descubrió que más de un tercio de los adultos con sobrepeso severo (IMC> 35 kg/m2) todavía tienen grasa parda activa. En el estudio, los voluntarios fueron expuestos primero a un frío moderado usando chalecos de enfriamiento para activar la grasa marrónparda, que luego fue detectada mediante una exploración PET-CT. “En los adultos, la grasa parda se encuentra predominantemente en la base del cuello y en la caja torácica. Un breve período de estimulación fría de aproximadamente una hora es suficiente para activarla”, dijo el líder del estudio, Kiefer. Los participantes con sobrepeso con grasa parda mostraron un mayor consumo de energía, grasa abdominal menos dañina, un metabolismo del azúcar más saludable y menos signos de enfermedad del hígado graso que un grupo de control de peso similar pero sin grasa parda detectable.

Kiefer comenta: “Es bastante sorprendente que los participantes con grasa marrón obtuvieran mejores resultados en casi todos los parámetros metabólicos, a pesar de que tenían un IMC ligeramente más alto. Estos datos una vez más nos muestran que no es solo la cantidad de tejido adiposo lo que importa, sino más lo que es más importante su calidad”.

De hecho, las diferencias en la distribución de grasas pueden haber contribuido al estado metabólico ventajoso. En particular, la proporción de grasa abdominal profunda (grasa visceral), que representa un alto riesgo de diabetes y ataque cardíaco, fue significativamente menor en el grupo de grasa parda. “Es concebible que el aumento de la actividad metabólica de la grasa parda se descomponga y queme preferentemente las reservas de grasa visceral dañinas en primer lugar. Es por eso que actualmente estamos trabajando arduamente para desarrollar tratamientos farmacológicos para activar la grasa parda”, explica Kiefer. Los científicos de MedUni Vienna de los departamentos de imágenes biomédicas y terapia y cirugía guiadas por imágenes y del Departamento de Medicina de Laboratorio también participaron en el estudio.

Fuente: https://medicalxpress.com

Referencia: Herz CT, Kulterer OC, Prager M, et al. Active brown adipose tissue is associated with a healthier metabolic phenotype in obesity. Diabetes. 2021 Oct 18:db210475.