SE ENCUENTRA QUE EL MICROBIOMA INFLUENCIA LA PRODUCCIÓN INTESTINAL DE SEROTONINA Y LOS NIVELES DE AZÚCAR EN LA SANGRE

Por primera vez, los científicos han demostrado cómo las alteraciones de las bacterias intestinales pueden alterar la producción de serotonina intestinal y cambiar los niveles de azúcar en la sangre.

Además de una comprensión cada vez mayor del papel que juega el microbioma en nuestro metabolismo, un nuevo estudio de investigadores australianos y canadienses ha descubierto cómo las bacterias intestinales pueden influir directamente en los niveles de azúcar en la sangre al promover la síntesis de serotonina derivada del intestino.

La serotonina es probablemente mejor conocida como el neurotransmisor que influye en los sentimientos de felicidad y regula el estado de ánimo, pero la molécula en realidad tiene efectos increíblemente amplios en todo el cuerpo. De hecho, más del 90% de la serotonina producida por un cuerpo humano se encuentra en el intestino. Los científicos recién ahora están aprendiendo sobre el papel que juegan estas secreciones intestinales de serotonina en la regulación de todo, desde nuestros movimientos gastrointestinales hasta nuestro metabolismo general.

Como la serotonina no puede cruzar la barrera hematoencefálica, no se cree que estas secreciones intestinales influyan directamente en nuestro cerebro. En cambio, los niveles de serotonina intestinal y sanguínea parecen jugar un papel importante en nuestro perfil metabólico general. En sujetos obesos, por ejemplo, se ha detectado serotonina circulante a niveles más altos que en sujetos de peso normal, lo que sugiere que la molécula puede influir en la regulación del peso.

Esta nueva investigación se propuso investigar la relación entre el microbioma intestinal, la síntesis de serotonina y los niveles de azúcar en la sangre. La hipótesis era que las bacterias intestinales pueden ser un factor en la regulación de la producción de serotonina intestinal y, posteriormente, el metabolismo de la glucosa.

Mediante el uso de modelos animales genéticos y farmacológicos, la investigación descubrió que las perturbaciones del microbioma intestinal efectivamente causaron interrupciones en la síntesis de serotonina intestinal, y estos factores podrían correlacionarse con mejoras en el manejo de la glucosa. Entonces, esencialmente, cuanto más altos son los niveles de serotonina intestinal y sanguínea, peor es el manejo de glucosa del cuerpo.

«Descubrimos que el microbioma empeora nuestro metabolismo al enviar señales a las células del intestino que producen serotonina», dice Damien Keating, de la Universidad de Flinders de Australia, y autor correspondiente del nuevo estudio. «Aumentan los niveles de serotonina, que previamente demostramos que aumentan en humanos obesos, y este aumento en la serotonina en la sangre causa problemas metabólicos significativos».

El estudio tal vez plantea tantas preguntas como respuestas, allanando el camino para una gran cantidad de investigación. Keating es muy claro sobre hacia dónde se dirige la próxima etapa del proyecto de investigación: explorar exactamente cómo está teniendo lugar este mecanismo inducido por el microbioma.

«Esta es una revelación emocionante que algún día puede tener implicaciones directas para los trastornos de la salud humana como la diabetes, pero se requiere mucha más investigación como esta en los próximos años», dice Keating. «El siguiente paso será comprender exactamente qué bacteria hace esto y cómo, con la esperanza de que esto pueda conducir a nuevos enfoques para regular los niveles de azúcar en la sangre en los humanos».

Fuente: https://newatlas.com

Referencia: Martin AM, Yabut JM, Choo JM, et al. The gut microbiome regulates host glucose homeostasis via peripheral serotonin. Proc Natl Acad Sci U S A. 2019 Sep 16.