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Las personas que siguen dietas bajas en carbohidratos o grasas pueden no vivir más tiempo, a menos que también tengan cuidado de evitar la comida chatarra y los dulces, sugiere un estudio de EEUU. Los investigadores siguieron a 37.233 adultos durante dos décadas a partir de los 50 años, en promedio. Durante el estudio, murieron 4.866 personas, o alrededor del 13% de los participantes. En general, las tasas de mortalidad fueron similares para las personas que siguieron dietas bajas en carbohidratos o grasas y las que no lo hicieron, informan los investigadores en JAMA Internal Medicine.

Sin embargo, el riesgo de muerte prematura parecía menor para las personas con estas dietas que consumían alimentos más saludables como proteínas vegetales, grasas insaturadas y carbohidratos de alta calidad como verduras, frutas, legumbres y granos integrales. Por el contrario, la mortalidad fue mayor para las personas cuyas dietas incluían muchas grasas saturadas y proteínas animales.

“Los beneficios para la salud de una dieta baja en carbohidratos pueden depender no solo de los tipos de proteínas y grasas, sino también de la calidad de los carbohidratos que quedan en la dieta”, dijo el líder del estudio, el Dr. Zhilei Shan, de la Escuela de Salud Pública de Harvard TH Chan en Boston.

Entre las personas que hacen dieta baja en carbohidratos, las personas que obtuvieron la mayor cantidad de calorías de los alimentos poco saludables tenían un 16% más de probabilidades de morir durante el estudio que las personas con las dietas más saludables.

Con las dietas bajas en grasas, las personas que obtuvieron la mayor cantidad de calorías de los alimentos poco saludables tenían un 12% más de probabilidades de morir. Los hallazgos provienen de las respuestas a las encuestas dietéticas nacionales realizadas entre 1999 y 2014. Se les pidió a los participantes que recordaran todo lo que comieron en las últimas 24 horas, brindando una instantánea de sus hábitos alimenticios.

Durante el período de estudio, 849 personas murieron de enfermedad cardíaca y 1.068 murieron de cáncer. Varios tipos de cáncer y muchas enfermedades cardiovasculares están asociadas con dietas poco saludables. El estudio no fue diseñado para probar si algún hábito alimenticio específico podría ayudar a las personas a vivir más tiempo, o cómo tener el efecto contrario.

Una limitación del análisis es que los investigadores solo pudieron calificar la calidad de la dieta de los participantes en función de su recuerdo de la ingesta de alimentos de un solo día, y es posible que algunas personas cambien sus hábitos alimenticios con el tiempo.

No está completamente claro qué sucede en el cuerpo cuando las personas consumen diferentes tipos de carbohidratos o grasas que podrían afectar la longevidad, dijo Kevin C. Maki, investigador de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Indiana en Bloomington que no participó en el estudio.

Comer muchas grasas saturadas, por ejemplo, podría aumentar el colesterol, y consumir más grasas no saturadas podría ayudar a reducir el colesterol, dijo Maki por correo electrónico. El colesterol alto es un factor de riesgo para la enfermedad cardiovascular. Más allá de esto, las personas que comen bien pueden tener otros hábitos saludables que les ayuden a vivir más tiempo. “Las personas que tienen una dieta de mayor calidad tienden a hacer más ejercicio, tienen un peso corporal más bajo, tienen menos probabilidades de fumar y beber alcohol en exceso, y tienen más probabilidades de someterse a las pruebas de salud recomendadas.

Fuente: https://www.reuters.com

Referencia: Shan Z, Guo Y, Hu FB, rt al. Association of low-carbohydrate and low-fat diets with mortality among US adults. JAMA Intern Med. 2020 Jan 21.