UNA NUEVA MOLÉCULA PARA COMBATIR LA DIABETES TIPO 2 Y LA ENFERMEDAD DEL HÍGADO GRASO NO ALCOHÓLICO

Una nueva molécula, la EPB-53, podría ayudar a combatir la diabetes tipo 2 y la enfermedad del hígado graso no alcohólico. Según un nuevo estudio, la molécula EPB-53 aumenta los niveles de la hormona FGF21, un factor biológico que desempeña un papel determinante en el control de la diabetes y la obesidad.

Una nueva molécula, la EPB-53, podría ayudar a combatir la diabetes tipo 2 y la enfermedad del hígado graso no alcohólico, según un nuevo estudio dirigido por el equipo de Manuel Vázquez-Carrera, de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación y el Instituto de Biomedicina de la Universidad de Barcelona (IBUB), y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Diabetes y Enfermedades Metabólicas Asociadas (CIBERDEM).

Otros participantes en el estudio, publicados en la revista British Journal of Pharmacology, son los miembros de los equipos dirigidos por los investigadores Francesc Villarroya, de la Facultad de Biología y el Instituto de Biomedicina de la Universidad de Barcelona (IBUB) y miembros de Centro de Investigación Biomédica de Redes de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (CIBERobn) y el Instituto de Investigación Sant Joan de Déu; y Santiago Vázquez, de la Unidad de Química Farmacéutica de la Facultad de Farmacia y Ciencias de la Alimentación de la UB e IBUB.

Diabetes: investigación sobre fármacos activos administrados por vía oral.

La hormona FGF21 – el factor de crecimiento de fibroblastos 21- es un factor endocrino con un papel determinante en el metabolismo energético como agente anti-diabetes y anti-obesidad. Esta hormona, que sintetiza principalmente el hígado, se considera un posible objetivo terapéutico para tratar la diabetes tipo 2 y la enfermedad del hígado graso no alcohólico, que generalmente ocurre debido a la obesidad y la resistencia a la insulina.

Sin embargo, los compuestos análogos de FGF21 que mostraron actividad farmacéutica en modelos animales requieren inyección subcutánea y pueden generar efectos adversos (pérdida de masa ósea, aumento de la frecuencia cardíaca y presión arterial, etc.). Según el nuevo estudio preclínico, los niveles de FGF21 en el hígado y el plasma pueden aumentar a través de la administración oral de la molécula EPB-53.

«Este efecto es posible porque EPB-53 es una molécula que activa el factor de iniciación de la traducción eucariota regulada por el hemo 2α (eIF2α) quinasa (HRI) aumentando los niveles hepáticos y circulantes de FGF21, una quinasa que puede aumentar un factor de transcripción involucrado en el aumento de FGF21, que reduce la tolerancia a la glucosa y la esteatosis hepática en ratones que se alimentan con una dieta rica en grasas», señala el investigador Manuel Vázquez-Carrera, del Departamento de Farmacología, Toxicología y Química Terapéutica de la UB.

Un problema creciente en la salud global

Las conclusiones del estudio demuestran que el uso de compuestos inductores de FGF21 podría conducir a nuevas estrategias terapéuticas para tratar la diabetes tipo 2 y la enfermedad del hígado graso no alcohólico, de manera similar a como lo hacen los compuestos análogos por vía subcutánea.

«Además, esperamos ver en futuros estudios que estos no causen los efectos adversos que se han descrito en algunos análogos de FGF21. Por lo tanto, estamos trabajando en el desarrollo de nuevos activadores HRI (activadores de inhibidores regulados por el hemo) con mejores características farmacocinéticas para el tratamiento de la diabetes tipo 2 como la esteatohepatitis no alcohólica», señala Vázquez-Carrera. La incidencia de diabetes mellitus tipo 2 ha aumentado entre la población en los últimos años y los medicamentos disponibles no pueden controlar el progreso de la enfermedad en todos los pacientes.

Además, la enfermedad del hígado graso no alcohólico afecta a una de cada cuatro personas y los peores casos, la esteatohepatitis no alcohólica, no tienen ningún fármaco aprobado específico.  Encontrar nuevos fármacos para la administración oral es, por lo tanto, uno de los desafíos de la biomedicina para mejorar la atención médica para millones de personas en todo el mundo, que se ven afectadas por estas enfermedades metabólicas.

Fuente: https://www.sciencedaily.com

Referencia: Zarei M, Pujol E, Quesada-López T, et al. Oral administration of a new HRI activator as a new strategy to improve High-Fat-Diet-induced glucose intolerance, hepatic steatosis and hypertriglyceridemia through FGF21. Br J Pharmacol. 2019 Mar 30. doi: 10.1111/bph.14678.